Una de las lesiones más comunes que vemos en la clínica es la tendinopatía del Aquiles. Se caracteriza por dolor en frio como al levantarse por las mañanas o tras largos periodos de estar quieto sentado y arrancar por una molestia o dolor evidentemente en el tendón del Aquiles en todo su recorrido que puede ir desde por encima de nuestro calzado hasta el talón casi tocando el suelo.
Sin embargo, algo que hemos visto es que cualquiera puede sufrirlo, desde alguien con patologías añadidas como diabetes, o muy deportistas, ¡¡o gente sedentaria… el abanico de afectados es muy extenso y la clave para un buen pronóstico es la rápida actuación!!
Los tiempos de recuperación se acortan muchísimo y las técnicas son mucho más agradable si aplicamos la solución en cuanto aparecen los síntomas anteriores, si esperamos a presentar cojera o limitación al movimiento el problema se “enquistará”.
¡Desde la fisioterapia lo abordamos desde muchas maneras! ¡Un enfoque holístico de la lesión es la clave del éxito! Detectar la causa es básico y después devolverle al tendón sus propiedades elásticas con tratamientos en el musculo, utilizando no solo manos si no técnicas novedosas para mejorar el trofismo y la captación de colágeno en el tejido como puede ser la diatermia, la cual además es muy agradable, o por el contrario si la lesión esta avanzada aplicamos estudios ecográficos en vivo para aplicar tratamientos dentro del tendón.
Por supuesto la implicación del afectado es parte fundamental en la recuperación y se antojan necesarios ejercicios de sencilla ejecución incluso en domicilio para fortalecer y prevenir recaídas o en caso de pacientes con aspiraciones deportivas pautamos tablas personalizadas para cada caso y necesidad.
Como hemos mencionado anteriormente hay casos en los que la alimentación u otras patologías pueden estar favoreciendo la dolencia y podemos asesorar con consejos de nutrición o suplementación para evitar que siga afectando al tejido. ¡Somos lo que comemos!
Actualmente los tiempos de recuperación se están acortando considerablemente en comparación con hace tan solo 5 años, pero la llave para ello es un correcto y prematuro diagnóstico de la lesión y correcta puesta en marcha de un conjunto de técnicas, ¿ese dolor en frio por las mañanas o al levantarse no tiene por qué agravarse y “cronificar”!